San Jose, Arenal y Monteverde

Mis padres ya estaban en Costa Rica cuando aterrice, lo que no contaba es que estuvieran en el aeropuerto esperandome, pues habiamos quedado en el hotel, con lo cual la alegre sorpresa fue doble. De San Jose solo mentar que vimos ese prodigio de equipo llamado barça, por su juego, resultados, humildad y por ser muchos de casa, en la finalisima contra el Manchester. Nunca vi un partido tan bueno en un bar tan insulso. En fin, triplete!!! A la mañana siguiente tan pronto recogimos el coche y descubrimos las maravillas del GPS, nos encaminamos al parque nacional del arenal, muy conocido por contener el volcan arenal, considerado entre los 10 mas activos del mundo y que emana lava a diario. Nos enrolamos en un tour de visita a unas piscinas de aguas termales y visita nocturna a los aledaños del volcan para ver la lava, rojiza en la noche. A penas se dejo ver dos instantes, ya que el cono esta permanentemente tapado por nubes, pero fueron momentos unicos. Los vulcanologos preveen que cualquier dia suelta un petardazo y todos a correr... Tambien visitamos el parque nacional durante el dia y los caminos de los alrededores. Pudimos ver entre otros: diferentes tipos de lagartos y de insectos, algun ave, mas bien sus cantos, una familia de monos congo, coaties y lo mejor de todo serpientes: las peligrosisimas coral, de bellos colores, y la terciopelo, imprevisible como la mamba.
De buena mañana fuimos a explorar el "cercano" parque nacional de monteverde, muy famoso por la presencia del flamante quetzal, que debe ser como las meigas, que haberlas ailas. Lo mejor para ver fauna el programa nocturno. Guiados por la simpatica Alejandra, contemplamos diferentes tipos de ranas e insectos, a destacar una tarantula como un puño; mapaches y erizos arboricolas y los preciosos perezosos, hasta tres; entre ellos una madre que abrazaba a su retoño. A la mañana siguiente pateamos el bosque nuboso de monteverde, tan espectacular en sus vistas, como tacaño en mostrar animales. Exhaustos regresamos al hotel y tuvimos interesantes charlas con unas señoras californianas y un neoyorquino que tenia un palique inacabable. Lo mejor, hacer de traductor english-spanish entre los USAs y mis padres. Ver para creer...